Contribuciones de la Terapia Integrativa a la psicoterapia infantil

Actualmente la mayoría de los profesionales clínicos selecciona aspectos de diversos modelos, más que adherirse con estrechez a uno solo identificándose como integradores o eclécticos. El terapeuta ve las necesidades del niño desde múltiples perspectivas y desarrolla un plan de tratamiento que responda a aspectos particulares. Algunos casos pueden implicar un enfoque en la familia, otros requieren un análisis más detallado del desarrollo, etc.

La Psicoterapia Integrativa pretende nutrirse de la investigación y de la experiencia clínica, para generar una teoría más completa, capaz de respaldar un accionar clínico más efectivo.

Entre los desafíos que debe enfrentar una Psicoterapia Integrativa es posible destacar los siguientes:

• Asumir un adecuado punto axial como lo llamaba Jaspers, es decir un punto de observación tranquilo y amplio, que permita acceder a la observación de los 360 grados de la dinámica psicológica

• Aportar sistematización y orden al panorama de creciente desorden que presenta la psicoterapia

• Privilegiar el conocimiento y al paciente por encima de sectarismos y dogmatismos

• Establecer criterios epistemológicos claros y compartidos acerca de los alcances del conocimiento en psicoterapia, y acerca de qué se considerará un conocimiento válido

Para la Psicoterapia Integrativa, existen tres formas en las cuales los profesionales clínicos integran el modelo terapéutico: eclecticismo técnico, integración teórica y modelo de los factores comunes.

Eclecticismo técnico: estos terapeutas no se afilian a modelos teóricos particulares, sino que están dispuestos a reconocer que una técnica particular es efectiva para cierto tipo de problema.

Integración teórica: implica la formulación de un modelo terapéutico que une modelos divergentes consistentes con el propio trabajo clínico. En cierta forma el profesional clínico está desarrollando su propio modelo por medio de una síntesis conceptual de las contribuciones de modelos previamente establecidos.

Modelo de factores comunes: el profesional clínico desarrolla una estrategia al estudiar los ingredientes centrales que diversas terapias comparten y al elegir los componentes que han demostrado, con el paso del tiempo, ser los contribuyentes más efectivos para los resultados positivos en psicoterapia. Factores comunes más que técnicas específicas hacen que la psicoterapia funcione. Se considera que la alianza de trabajo es el componente clave de la psicoterapia.

La característica principal de un modelo integrativo es que no es rígido, está abierto al cambio y a una búsqueda constante de nuevos conocimientos, puede tolerar la incertidumbre y procura tener la suficiente agudeza y flexibilidad para rectificar, integrar y cambiar.

El término integrativo se refiere a la integración de la teoría, desarrollo afectivo, cognitivo y fisiológico, así como el comportamiento. La Psicoterapia Integrativa interrelaciona constructos procedentes de muchas escuelas teóricas. Para que una teoría sea integrativa, como oposición al hecho de ser meramente ecléctica, debe separar aquellos conceptos e ideas que no son teóricamente consistentes para conformar un núcleo coherente de constructos que den información y guíen el proceso terapéutico.

Para el enfoque integrativo se hace imprescindible la relación, es decir el contacto de las transacciones y comunicación entre dos personas. La técnica más efectiva sería inútil a menos de que el terapeuta y el niño estén aliados en una relación de trabajo de colaboración. La relación del terapeuta debe ser empática con la experiencia subjetiva del niño; es esencial que el terapeuta comprenda la necesidad única de cada niño que atiende.

El terapeuta parte de la premisa que no sabe nada acerca de la experiencia del paciente y por lo tanto, debe esforzarse continuamente por entender el significado subjetivo del comportamiento del niño y sus procesos intrapsíquicos. El terapeuta ha de estar abierto al descubrimiento del niño a través de una exploración respetuosa de la experiencia. El niño comienza a ser consciente tanto de las necesidades arcaicas como de las actuales, así como de sus sentimientos y comportamientos. El objetivo es que el terapeuta y el niño descubran y distingan juntos las funciones de procesos intrapsíquicos y dinámicas de las defensas, tomando en cuenta siempre tanto los límites del niño como los del terapeuta y los del proceso mismo (ritmo de trabajo), así como del macrosistema (escuela, amigos, actividades y otras personas) y del microsistema (familia nuclear y extensa).

En el siguiente cuadro se esquematizan los factores que la Psicoterapia Integrativa toma para establecer una meta terapéutica y sistematizar el trabajo como el menor:

A continuación, se enlistan los principales postulados de la Terapia Integrativa:

• Es consistente

• Es un proceso interpersonal

• El diagnóstico integral es considerado crucial en términos de predicción de evolución clínica y en términos de selección de estrategias clínicas

• Los objetivos terapéuticos son esclarecidos y acordados con el paciente y sus padres.

• El cambio clínico será diferente en función de la parte específica del sistema que sea influenciada (padres o cuidador principal)

• Cualquier cambio específico de una parte del sistema tiende a irradiarse en el sistema total

• Cualquier cambio en el sistema total tiende a afectar cada parte del sistema psicológico del niño

• Las variables inespecíficas (en ocasiones para los papás) van adquiriendo especificidad en el marco de la Psicoterapia Integrativa

• Los principios de influencia (el terapeuta) aportan especificidad a la psicoterapia integrativa

• El eje de la psicoterapia infantil es la traducción de la experiencia

• El desarrollo de cada sistema tiene efectos preventivos

• Es un proceso creativo sobre bases científicas

La Terapia Integrativa se puede considerar dentro de un modelo ecosistémico, ya que considera al individuo como un sistema complejo donde se integran lo biológico, afectivo, cognitivo y conductual, que se desarrolla en interacción con un ambiente específico familiar y sociocultural en un determinado tiempo histórico.

Desde esta perspectiva, antes de iniciar el tratamiento, en la historia clínica se deben recabar los datos de quién es la persona desde los aspectos genético, biológico y evolutivo, hasta el ambiente (micro y macrosistema) en el que el niño está inmerso. El problema se valora en todas sus dimensiones a través de las entrevistas con los padres y con el menor, además se utilizan diversas técnicas psicológicas para evaluarlo y en su caso, emitir un diagnóstico que permita abordarlo.

De esta manera, para llevar a cabo el tratamiento es necesario partir de una impresión diagnóstica que permita establecer objetivos y metas en función del problema. El tratamiento se considera un proceso desde el inicio hasta el cierre en el que se emplean diferentes técnicas para el logro de los objetivos. Los cambios que se den en torno al problema motivo de la consulta, necesariamente tienen que ser evaluados y mantenidos en el tiempo, por lo que se establece una fase de seguimiento para ver la evolución del problema y los efectos del tratamiento.

Post Author: Entorno Estudiantil

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