El buen samaritano

La del buen samaritano es una de las parábolas más conocidas de Jesús. Está recogida en el Evangelio según san Lucas y define el modelo de lo que debe ser el amor al que Jesús quiere que sus seguidores aspiren.

Un doctor de la ley preguntó a Jesús qué debía hacer para salvarse, y Jesús le respondió: «¿Qué está escrito en la Tora?». El doctor de la ley respondió: «Amarás al Señor» y «Amarás a tu prójimo». Jesús le respondió que siguiendo esas doctrinas conseguiría la salvación. Así que el doctor de la ley preguntó: «¿Quién es mi prójimo?». Entonces Jesús empezó a contarle esa parábola.

Jesús narra cómo un viajero es atacado, robado y abandonado en la cuneta de un camino. Un sacerdote camina junto a él pero evita acercarse al hombre al ver el aspecto que tiene. A continuación, un levita (un miembro de otra secta reverenciada) pasa y también ignora al viajero. Finalmente, se acerca por allí un samaritano; los samaritanos eran una etnia odiada y condenada al ostracismo en aquella época. Sin embargo, según la historia, el samaritano es el único que decide ayudarlo dándole vestimenta, cobijo y alimento a la víctima.

Jesús se vuelve hacia el doctor de la ley que le ha hecho la pregunta y le explica que el samaritano, el que parecía en un principio con menos probabilidades de ayudar al viajero y que lo hizo sin pedir nada a cambio, era el prójimo del viajero. Este es un ejemplo perfecto de cómo Jesús asombraba a menudo Su audiencia para hacer llegar su mensaje.

La exaltación de un samaritano, aunque en la actualidad carece de controversia, en aquella época causaría perplejidad, subrayando así la importancia de ayudar a quien lo necesita y la proximidad de toda la humanidad. Aunque se trata de un pasaje relativamente corto en el Evangelio de san Lucas, la idea del buen samaritano ha sido incorporada a la cultura general tanto por cristianos como por no cristianos.

OTROS DATOS DE INTERÉS

1. La etnia de los samaritanos, que actualmente se compone de unos cuantos cientos de personas que viven en el norte de Israel, se vio tan diezmada que el hecho de elegir a un samaritano como héroe se ha perdido. Con el tiempo, sin embargo, al volver a contar la historia, algunos han intentado recurrir a otras etnias que sirvieran al propósito inicial.

2. A día de hoy, cuando se habla de un buen samaritano nos referimos a una persona que, sin ningún interés, ayuda a otra que lo necesita, al margen de cualquier otra circunstancia.

3. En la actualidad, en muchos países existen las leyes del buen samaritano. Se utilizan para proteger a aquellos que ayudan a otras personas frente a demandas judiciales.

Post Author: Entorno Estudiantil

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