El conocimiento a priori

La mayor parte del conocimiento que tenemos del mundo viene de la experiencia. Por ejemplo, sabemos que hay un árbol frente a una ventana porque lo vemos. Sabemos que el árbol necesita sol y agua para crecer porque los científicos han observado cuidadosamente esos hechos. Generalmente conocemos nuestro entorno inmediato porque lo percibimos, y adquirimos conocimiento científico del mundo observándolo y realizando experimentos sobre él.

Sin embargo, una parte de nuestro conocimiento no depende de la experiencia entendida de este modo. Por ejemplo, sabemos que todos los solteros son hombres que no se han casado. ¿En qué nos basamos para creer esto? No depende de ninguna experiencia. Si fuera así deberíamos salir a la calle e investigar a cada soltero para determinar si se trata de un hombre que todavía no se ha casado para saberlo. Pero no lo hacemos. Simplemente sabiendo el significado de las palabras «soltero» y «no casado» ya podemos decir que un soltero es alguien que no se ha casado. (No vamos a negar que es necesario tener una experiencia del mundo para saber qué es lo que significan esas dos palabras. Sin embargo, la cuestión es si, habiendo comprendido su significado, tenemos que hacer más experimentos para justificar la certeza de que todos los solteros son hombres que no se han casado.)

Es más, ¿qué experiencia podría llevarnos a negar que todos los solteros son hombres que no se han casado? Si no es posible tener una experiencia como ésa, podríamos decir que la base de que creamos que es cierto es independiente de nuestra experiencia. Aquel saber que no depende de la experiencia se conoce como conocimiento a priori, porque está demostrado sin tener que apelar a la experiencia.

Otro ejemplo de este conocimiento son las expresiones matemáticas. Sabemos que 1 + 1 = 2. Sin embargo, no hemos llegado a este conocimiento a través de la experiencia. Una buena prueba para  saber si es justificable hacer una afirmación a priori es: ¿estaríamos dispuestos a negar esta afirmación si la experiencia nos dijera lo contrario? Decir que 1 + 1 = 2 es un conocimiento a priori es lo mismo que decir que no tendríamos que ir en contra de esa afirmación independientemente de cuál fuera el resultado de nuestra experiencia.

OTROS DATOS DE INTERÉS

1. Algunos filósofos dudan de si podemos tener conocimientos a priori que vayan más allá de la lógica o del significado de las palabras que empleamos.

2. Otros defienden que no tenemos nada parecido al conocimiento a priori. Incluso nuestros conocimientos sobre las matemáticas oh lógica, aseguran, dependen de la experiencia.

Post Author: Entorno Estudiantil

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