De 3 a 4 años
- Le interesan nuevas experiencias
- Coopera con otros niños
- Juega a “mamá” o “papá”
- Tiene cada vez más inventiva en juegos de fantasía
- Se viste y se desviste
- Negocia soluciones para los conflictos
- Más independiente
- Imagina que muchas imágenes no familiares pueden ser “monstruos”
- Se ve a sí mismo como una persona plena, que implica cuerpo, mente y sentimientos
- A menudo no puede distinguir entre fantasía y realidad.
De 4 a 5 años
- Quiere complacer a los amigos
- Quiere ser como sus amigos
- Es más probable que acepte reglas
- Le gusta cantar, bailar y actuar
- Muestra más independencia y hasta puede visitar solo a algún vecino inmediato
- Está consciente de su sexualidad
- Puede distinguir la fantasía de la realidad
- Algunas veces es exigente, otras es sumamente colaborador
De 5 a 6 años
La relación familiar sigue siendo muy positiva, centrada especialmente en la madre, aunque el padre adquiere cada vez mayor importancia para el niño. Se muestra servicial, tiende a agradar porque es muy dependiente. Además, es capaz de mantener un diálogo con cualquier persona adulta. Con sus hermanos pequeños adopta una actitud proteccionista, con los otros niños juega y empieza a aceptar las normas y reglas de los juegos. Siente fascinación por la televisión, especialmente por los programas infantiles.