El relativismo moral

Las diversas culturas tienen estándares morales muy diferentes y a menudo visiones opuestas sobre lo que es moralmente permisible. ¿Acaso esto significa que no hay normas morales objetivas?

El relativismo moral defiende que no hay una verdad objetiva sobre lo que es correcto o erróneo. Todo lo que podemos hacer para juzgar si una acción es correcta o no es contraponerla con uno o varios estándares. El hecho de que haya diversidad de opiniones morales no significa necesariamente que el relativismo moral sea una postura acertada. Por ejemplo, puede haber diversas opiniones sobre las características físicas del mundo, pero eso no significa que todos los sistemas científicos sean igualmente válidos; los métodos científicos de algunas culturas pueden simplemente ser inapropiados.

El relativismo moral recurre a dos estrategias para defender su punto de vista. La primera es argumentar qué es lo que mejor explica la diversidad moral. Teniendo en cuenta que hay estándares morales diferentes, sus seguidores se preguntan: ¿cómo se explica que la persona con la postura moral correcta acabe defendiendo las creencias correctas mientras que la persona con las creencias falsas se equivoque?

La segunda defensa que esgrime el relativismo moral es argumentar directamente que no hay nada que se denomine hecho moral objetivo. Para que haya hechos morales objetivamente hablando es necesario que haya propiedades morales objetivas: «bondad» y «maldad». Sin embargo, ser bueno no es una propiedad física, porque los actos buenos moralmente no son, en ningún sentido, propiedades morales objetivas, al contrario de lo que creemos normalmente.

OTROS DATOS DE INTERÉS

1. Hay pocos seguidores del relativismo moral entre los filósofos contemporáneos.

2. El filósofo Gilbert Harman (1938-) es el relativista moral contemporáneo de mayor influencia.

Post Author: Entorno Estudiantil

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