El pequeño libro del talento: 52 consejos para mejorar tus habilidades
Visión general
Daniel Coyle es el autor de The Talent Code, en el que explica cómo se hace el talento.
El cuento: el talento es el resultado de la práctica + motivación + tener un gran entrenador. No se trata de rasgos innatos; se trata de (¡el tipo correcto de!) practicar, practicar, practicar.
Coyle llegó a esta conclusión después de visitar nueve supuestos semilleros de talento, lugares que crean una cantidad extraordinaria de artistas altos. En esos semilleros, vio los mismos patrones una y otra vez: los grandes artistas se volvieron grandes combinando práctica, motivación y master coaching.
Pero la gente en esos semilleros no practicaba como todos los demás. Practicaron de maneras que conducen a un desarrollo de habilidades mucho más rápido y superior. Coyle aprendió muchos pequeños trucos sobre la práctica bien mientras visitaba esos semilleros.
El Pequeño Libro del Talento es esencialmente una recopilación de todos los pequeños consejos y trucos que aprendió de visitar esos semilleros. Como escribe en la introducción, "Lo que sigue es una colección de consejos simples y prácticos para mejorar las habilidades, tomados directamente de los semilleros que visité y de los científicos que las investigan. El consejo es probado sobre el terreno, científicamente sólido y, lo más importante, conciso".
Continúa: "Cualquier talento que te prospirás para construir, desde el golf hasta el aprendizaje de un nuevo idioma, pasando por tocar la guitarra y gestionar una startup, ten la seguridad de una cosa: naces con la maquinaria para transformar la torpeza de los principiantes en una acción rápida y fluida. Esa maquinaria no está controlada por genes, es controlada por ti. Cada día, cada sesión de práctica, es un paso hacia un futuro diferente. Esta es una idea esperanzadora, y lo más esperanzador de ello es que es un hecho".
Mira a quién quieres convertirte
Consejo 1
"Si visitaras una docena de semilleros de talento mañana, te sorprendería cuánto tiempo pasan los estudiantes observando a los mejores artistas. Cuando digo "observar", no estoy hablando de mirar pasivamente. Hablo de mirar fijamente: el tipo de miradas crudas, desenfadándose e intensamente absortas que se ven en gatos hambrientos o recién nacidos.
Cada uno de nosotros vive con un "parabrisas" de personas frente a nosotros; una de las claves para encender tu motivación es llenar tu parabrisas con imágenes vívidas de tu futuro yo, y mirarlos todos los días. Los estudios muestran que incluso una breve conexión con un modelo a seguir puede aumentar enormemente la motivación inconsciente. Por ejemplo, que te digan que compartes un cumpleaños con un matemático puede mejorar la cantidad de esfuerzo que estás dispuesto a poner en tareas matemáticas difíciles en un 62 por ciento".
¿Quieres motivación? Llena tu parabrisas con imágenes vívidas de tu futuro deseado.
Marca algunos vídeos de YouTube y míralos regularmente. Personalmente, me gusta ver clips de la película Sin límites. Me hace querer convertirme en el tipo de persona que Bradley Cooper interpreta en esa película, y nunca deja de motivarme.
No caigas en el mito del prodigio
Consejo 2
"La mayoría de nosotros crece siendo enseñados que el talento es una herencia, como el cabello castaño o los ojos azules. Por lo tanto, suponemos que el signo más seguro del talento es el éxito temprano, instantáneo y sin esfuerzo, es decir, ser un prodigio. De hecho, una investigación bien establecida muestra que esa suposición es falsa. El éxito temprano resulta ser un débil predictor del éxito a largo plazo".
"Los semilleros de talento no se construyen sobre la identificación de talentos, sino en su construcción, día a día".
Si todavía crees en el mito de lo natural – el mito de que los rasgos innatos son más importantes que el esfuerzo y la práctica, entonces sugiero leer El Código de Talento, Pico o Talento está sobrevalorado.
Estos libros disipan el mito del talento natural y nacido como la fuerza impulsora detrás de la grandeza. Como coyle señala: la grandeza no nace, ha crecido.
La creencia en el esfuerzo por el talento natural te ayudará a lo largo de toda tu vida. Mejor arrainerlo completamente más pronto que tarde. (Tristemente, la mayoría de la gente va a la tumba todavía pensando que o la tienes o no la tienes. Lo que causa mucho daño, y simplemente no es cierto.)
Encuentra el punto dulce
Consejo 3
"Hay un lugar, justo al borde de tu habilidad, donde aprendes mejor y más rápido. Se llama el punto dulce. He aquí cómo encontrarlo.
Zona Confort
Sensaciones: Facilidad, sin esfuerzo. Estás trabajando, pero no alcanzas ni luchas. Porcentaje de intentos exitosos: 80 por ciento o más
Punto dulce
Sensaciones: Frustración, dificultad, estado de alerta ante errores. Estás completamente involucrado en una lucha intensa, como si estuvieras estirando con todas tus fuerzas para lograr una meta casi inalcanzable, cepillarlo con las yemas de los dedos y luego alcanzar de nuevo. Porcentaje de intentos exitosos: 50-80 por ciento.
Preste atención inmediatamente después de cometer un error
Consejo 5
"Los estudios de exploración cerebral revelan un instante vital, 0,25 segundos después de que se comete un error, en el que las personas hacen una de dos cosas: miran con fuerza el error o lo ignoran. Las personas que prestan más atención a un error aprenden significativamente más que aquellos que lo ignoran".
Prestar atención a los errores es similar a abrazar la lucha: es algo que tendemos a ignorar, pero algo que es profundamente necesario para desarrollar habilidades rápidamente.
Desarrolla el hábito de enfrentar tus errores. Averiguar lo que salió mal y por qué. Trata de hacerlo mejor la próxima vez. Como dice Coyle, toma tus errores en serio, pero nunca personalmente.
Zona de supervivencia
Sensaciones: Confusión, desesperación. Estás superada: luchando, golpeando y adivinando. A veces lo adivinas bien, pero sobre todo es suerte. Porcentaje de intentos exitosos: Por debajo del 50 por ciento."
El punto dulce es donde se maximiza el aprendizaje. Es el lugar justo en el borde de su zona de confort y un poco más allá de ella.
Como explica Coyle, la práctica en el punto dulce es la cantidad justa de desafío, mientras que la práctica en la zona de confort no es lo suficientemente desafiante, y la práctica en la zona de supervivencia es demasiado difícil.
Aconseja preguntarse: si has intentado lo más duro, ¿qué podrías hacer casi? Encuentra el límite de tu habilidad actual, y apunta un poco más allá de eso. Ese es el punto dulce.
Tomar una siesta
Consejo 6
"Este es uno de mis consejos favoritos. La siesta es común en los semilleros de talento, y cuenta con justificación anecdótica y científica.
El anecdótico: Albert Einstein era bueno en física, y era muy bueno en su pos-almuerzo diario de veinte minutos de posmués. Otros famosos restaurantes incluyen Leonardo da Vinci, Napoleón Bonaparte, Winston Churchill, Thomas Edison, Ronald Reagan, John F. Kennedy y John D. Rockefeller. Pasa tiempo con cualquier equipo deportivo profesional, y verás que también son ingenuos profesionales.
La ciencia: La siesta es buena para el cerebro de aprendizaje, porque ayuda a fortalecer las conexiones formadas durante la práctica y preparar el cerebro para la próxima sesión".
La siesta es común en los semilleros.
Esto va de la mano con la investigación de anders Ericsson de experiencia. Menciona en su libro Peak que los mejores intérpretes del mundo no sólo practican más y mejor, sino que también descansan cada vez mejor.
En uno de sus estudios, los mejores violinistas durmieron alrededor de cinco horas más que los violinistas promedio. Y obtener esto: la forma en que se durmió más fue principalmente a través de las siestas de la tarde.
Hacer alcances positivos
Consejo 7
"Hay un momento antes de cada representante cuando te enfrentas a una elección: puedes centrar tu atención en el objetivo (lo que quieres hacer) o puedes concentrarte en el posible error (lo que quieres evitar). Este consejo es simple: Siempre concéntrese en el movimiento positivo, no en el negativo.
Por ejemplo, un golfista que alinea un putt debe decirse a sí mismo: 'Centro de la carrera', no 'No tires de este putt a la izquierda'. Un violinista que se enfrenta a un pasaje difícil debe decirse a sí mismo: 'Clava ese A-flat', no 'Oh chico, espero no perderme ese A-flat'".
Alcanza lo que quieres lograr, no lejos de lo que quieres evitar.
Un jugador de béisbol debe decirse a sí mismo: "Golpea a un jonrón", no "No te pongas en huelga".
Un golfista debe decirse a sí misma, "Centro de la carrera", no "No tires de este putt a la izquierda".
Un violinista debería decirse a sí mismo, "Nail that A-flat", no "Oh chico, espero no perderme ese A-flat".
Para aprender de un libro, cierre el libro
Consejo 8
"Vamos a fingir que dentro de una semana harás una prueba en las próximas diez páginas de este libro. Tienes treinta minutos para estudiar. ¿Qué método de práctica le ayudaría a obtener una mejor calificación?
1) Leer esas diez páginas cuatro veces seguidas, y tratar de memorizarlas.
2) Leer esas diez páginas una vez, luego cerrar el libro y escribir un resumen de una página.
Ni siquiera está cerca. Las investigaciones muestran que las personas que siguen la estrategia B recuerdan un 50 por ciento más de material a largo plazo que las personas que siguen la estrategia A".
Esto se remonta a la idea de abrazar la lucha. Leer pasivamente un libro es un proceso fácil y bastante sencillo: no es lo suficientemente difícil como para ser considerado en la zona de punto dulce.
Escribir un resumen, por otro lado, es mucho más una lucha y mucho más cerca del punto dulce. Tienes que luchar para traer de vuelta puntos clave, luchar para procesar y organizar esas ideas de una manera significativa, y luchar para escribirlas en la página.
Cerrar el libro y escribir un resumen es un dolor de. Y por eso funciona.
Tener una mentalidad de cuello azul
Consejo 9
"Desde la distancia, los mejores artistas parecen vivir vidas encantadas y cómodas. Sin embargo, cuando mires más de cerca, descubrirás que pasan grandes porciones de su vida practicando intensamente su oficio. Su mentalidad no tiene derecho ni es arrogante; es un collar azul al 100 por ciento: se levantan por la mañana y van a trabajar todos los días, les guste o no".
Como dice el artista Chuck Close, 'La inspiración es para aficionados'".
Los mejores del mundo practican su oficio a diario. Se presentan y hacen el trabajo, les guste o no.
Michael Phelps es uno de los mejores ejemplos para esto. Escribe en su libro No Limits: "Durante cinco años, de 1998 a 2003, no creíamos en días libres. Tuve uno debido a una tormenta de nieve, dos más debido a la extracción de muelas del juicio. ¿Navidad? Nos vemos en la piscina. ¿Acción de gracias? Piscina. ¿Cumpleaños? Piscina. ¿Obligaciones de patrocinador? Resolverlos alrededor del tiempo de práctica."
Piensa como un jardinero, trabaja como un carpintero
Consejo 10
"Todos queremos mejorar nuestras habilidades rápidamente, hoy, si no antes. Pero la verdad es que el talento crece lentamente. Usted no criticaría una plántula porque todavía no era un roble alto; ni te molestarías porque tu circuito de habilidades está en la etapa de crecimiento. En su lugar, construirlo con la práctica profunda diaria.
Para ello, ayuda 'pensar como un jardinero y trabajar como un carpintero'. Escuché este dicho en Spartak. Piensa pacientemente, sin juicio. Trabaje de manera constante, estratégica, sabiendo que cada pieza se conecta a un todo más grande".
Es un buen lema.
Piensa como un jardinero – pacientemente, sin juicio.
Trabaje como un carpintero – de manera constante, estratégica, sabiendo que cada pieza se conecta a un todo más grande.
Steven Pressfield lo dice de esta manera en La Guerra del Arte: "Alguien le preguntó una vez a Somerset Maugham si escribió en un horario o sólo cuando se vio afectado por la inspiración. ' Escribo sólo cuando llega la inspiración", respondió. "Afortunadamente golpea cada mañana a las nueve en punto."
