Tipos de mercado

No se puede considerar que existe un único mercado, sino que pueden existir muchas clasificaciones de mercado según el punto de vista desde el que se contemple. Los cuatro criterios más utilizados para clasificar el mercado son:

  1. según el producto que se comercializa
  2. según el ámbito geográfico
  3. según las características del comprador
  4. según la novedad del producto.

Según el producto que se comercializa

Mercado de productos de consumo: se comercializan productos para el uso personal o familiar. Dentro de ellos distinguimos dos tipos:

  • Inmediato: se consumen durante muy poco tiempo después de la compra (ej.: productos de la cesta de la compra).
  • Duradero: su consumo se hace a través del tiempo (ej.: un coche, una casa, etc.).

Mercado de productos industriales: se comercializan productos a otras empresas para incorporarlos a sus procesos productivos (ej.: maquinaria, equipos informáticos, materias primas, etc.).

Mercado de servicios: se caracterizan por el carácter intangible del producto (ej.: educación, banca, transportes, seguros, etc).

Según el ámbito geográfico

Según el área geográfica en la que se produzca la comercialización del producto, podremos hablar de:

Mercado local: por ejemplo, productos como Papas García, que solo se comercializan en Castellón.

Mercado regional: por ejemplo, las rosquilletas o los fartons, que solo se comercializan en la Comunidad Valenciana.

Mercado nacional: por ejemplo, en productos como las pipas, que solo se comercializan en España.

Mercado internacional: por ejemplo, en productos como el vino o el jamón, que se comercializan en todo el mundo.

Según las características del comprador

En función del agente que adquiera el producto podremos distinguir entre:

Mercado de consumidores: la principal unidad de compra es el comprador individual o la familia. En este caso la compra suele ser fácil y rápida.

Mercado de organizaciones: la principal unidad de compra es empresarial. En este caso, el número de compradores es mucho menor y las decisiones de compra suponen un proceso complejo y racional. Dentro de él podemos encontrar:

Mercado del fabricante: formado por todas las empresas que adquieren productos con el fin de aplicarlos a la fabricación de otros productos (ej.: empresas del sector cerámico, que compran a proveedores de esmalte, arcilla, etc.).

Mercado del intermediario: formado por empresas que adquieren productos para volverlos a vender sin ninguna transformación sustancial (ej.: cualquier supermercado).

Mercado institucional: formado por instituciones que compran productos con el fin de cumplir determinadas funciones propias como educación, atención sanitaria, alumbrado público, etc. (ej.: universidades, colegios, hospitales, entes autonómicos o municipales, etc.).

Según la novedad del producto

En función del grado de novedad del producto adquirido diferenciamos entre:

Mercado de primera mano: se comercializan productos nuevos (es el caso de la mayoría de productos).

Mercado de segunda mano: se compran productos ya utilizados (ej: Cashconverters, Ebay, concesionarios de vehículos de ocasión, etc.).

Post Author: Entorno Estudiantil

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