7 cosas que la escuela nunca te enseñará

Confiamos en las escuelas para enseñarnos muchas cosas para proporcionarnos los conocimientos básicos para navegar por la vida y el mundo. Si bien obtenemos parte de esta información, hay una gran cantidad de datos básicos y habilidades que las escuelas siempre no nos transmiten, a pesar de que nos servirían igual de bien o mejor que saber que las mitocondrias es la potencia de la célula.

Cómo manejar a los matones

En la escuela, a menudo nos encontramos con matones por primera vez, y, desafortunadamente, en muchos lugares, esta situación no se maneja correctamente. Como niños, podríamos ser dejados enfrentar a nuestros matones una y otra vez y castigados si respondemos.

El consejo más común es "simplemente ignorarlo", pero eso no siempre funciona. Podríamos aprender a soportarlo o enfrentar que estamos solos con nuestro trauma, pero no cómo manejarlo eficazmente.

Descubriremos que el acoso no se detiene una vez que dejamos la escuela. Podríamos encontrar matones en entornos sociales, en el trabajo, en la universidad y en más lugares. Es importante aprender a manejarlos con gracia, estableciendo límites, retirándose y, lo más importante, trabajando en nosotros mismos.

Cuando mejoramos a nosotros mismos y mejoramos nuestras propias inseguridades, podemos dar menos municiones a los matones y hacerlos menos propensos a atacarnos. Trabajar para desarrollar una confianza genuina puede ser una buena manera de protegerse de los matones, entre los muchos otros beneficios que tendrá para nosotros.

Finanzas

Las escuelas no suelen enseñar a manejar las finanzas y los entresijos relacionados con todos estos temas. Sin embargo, las finanzas son increíblemente importantes. Necesitamos saber qué hacer y qué evitar, cómo mantenernos a flote, cómo ahorrar dinero y cómo invertirlo.

Aprender nos faculta para tomar mejores decisiones financieras, evitar endeudarnos profundamente, resolver nuestras crisis y mucho más. ¿Qué debemos aprender para la gestión financiera? Podemos empezar con lo básico. Mantener y administrar un presupuesto puede ayudarnos a entender nuestros ingresos y la forma en que gastamos. Tener un presupuesto mensual nos permite prevenir compras impulsivas y usar solo el dinero que tenemos.

Ahorrar también es útil, y necesitamos encontrar maneras de incorporarlo a nuestras vidas. Ahorrar puede protegernos contra situaciones y gastos inesperados, así como darnos un colchón si queremos probar algo nuevo o salir de una situación rápidamente.

Conocimientos prácticos y habilidades cotidianas

Lograr la autosuficiencia es importante, y una gran parte de esto es ser capaz de manejar las actividades diarias, ya sea cocinar, limpiar, arreglar un inodoro o cualquier otra cosa. Puede que no hayamos aprendido esto en la escuela, pero todavía tenemos la responsabilidad de entenderlo.

No sólo puede ahorrarnos dinero, sino que también puede ayudarnos a sentirnos más en control, mejor equipados para manejar problemas críticos y menos propensos a dejar que los problemas aumenten. Hoy en día, aprender a gestionar las actividades cotidianas es más fácil que nunca: Internet está lleno de tutoriales y consejos.

Cómo lidiar con el fracaso

Las escuelas castigan el fracaso. Nos enseñan a evitarlo a toda costa y a menudo no nos ayudan a reconocer lo importantes que son los errores para nuestro progreso general. Aprendemos a evitar u ocultar nuestros fracasos, no a lidiar con ellos. En la vida, es posible que necesitemos aceptar el fracaso como una opción válida y centrarnos en las lecciones que puede traer.

¿Qué haríamos diferente la próxima vez? ¿Qué es lo más importante que podemos quitar de esta situación? Permitirnos fracasar con la frecuencia que necesitemos es importante.

Asuntos de salud mental

Otra cosa que rara vez se enseña en las escuelas es que nuestra salud mental es esencial y que debemos cuidarla. En general, se espera que sacrifiquemos nuestra salud mental en aras de buenas calificaciones. Sin embargo, eso no es sostenible. Tenemos que aprender a practicar el autocuidado: manejar nuestro horario de sueño, tomar descansos, apoyarnos, etc. Desarrollar y cultivar prácticas específicas, como la autocompasión, la gratitud, el altruismo y más, puede ser una buena manera de mejorar nuestra salud mental, y pueden practicarse a través de ejercicios diarios simples, como diarios o ayudar a los demás.

Socialización y Redes (Construcción Temprana de su  carrera)

Una escuela puede darnos los conocimientos teóricos que necesitamos para crecer profesionalmente, pero no siempre proporciona el apoyo práctico que necesitamos. ¿Cómo se hace una carta de presentación? ¿Cómo se consigue a través de una entrevista de trabajo? ¿Cómo se en red? Algunas escuelas proporcionan consejos obsoletos o ningún consejo en absoluto, por lo que tenemos que aprender sobre la marcha.

Necesitamos entender cómo construir redes, cómo influir en la gente, cómo comunicarse, cómo decirle a nuestro jefe que algo no va bien. Estas habilidades también son importantes para nuestra carrera, por lo que también necesitamos aprenderlas.

Establecimiento de objetivos y gestión del tiempo

Las escuelas establecen metas para sus estudiantes, y esto podría dejar a algunas personas sintiéndose perdidas después de irse. Tenemos que aprender a encontrar nuestros propios objetivos. Algo que ayuda mucho en el desarrollo de nuestra autonomía. La gestión del tiempo es otra habilidad que las escuelas a menudo no nos enseñan.

De hecho, a menudo aprendemos malos hábitos, como hacer los deberes el día antes de que se deba. Necesitamos saber cómo establecer plazos y cumplirlos, cómo aprovechar al máximo nuestro tiempo, y todas estas habilidades que nos permiten utilizar nuestro tiempo de la manera más productiva posible.