David

En 1501 la república de Florencia contrató a Miguel Ángel para que esculpiera la figura de David con el objeto de situarla en la fachada de la catedral de la ciudad. Este rey del Antiguo Testamento, un guerrero valeroso que consiguió vencer al gigante Goliat cuando era sólo un adolescente, estaba considerado como el protector de la ciudad toscana. En un principio se había hecho el encargo a un artista que murió poco después de cortar un enorme bloque de un mármol de gran valor.

Según la leyenda, Miguel Ángel logró el trabajo porque fue el único dispuesto a esculpir una piedra que ya había sido «estropeada». Cuando finalizó la escultura, en 1504, se pensó que era demasiado extraordinaria como para situarla en la parte superior de la iglesia. En su lugar, se colocó ante el Palazzo Vecchio en la Piazza della Signoria, en el mismo centro de Florencia.

La escultura, una de las obras maestras más sobresalientes del Renacimiento, muestra a un David en tensión justo antes de atacar a Goliat. No se trata del joven victorioso que presenta la famosa obra de Donatello, sino un adolescente preparado para la acción. Miguel Ángel se inspiró en los modelos clásicos y esculpió un cuerpo hermoso y atlético de pie, dejando caer su peso sobre una pierna y con la cabeza de porte noble girada hacia la izquierda. Los músculos de David dibujan todo su potencial de desarrollo mientras se prepara para matar al gigante. El tamaño exagera-do de sus manos y pies muestra las proporciones distorsionadas de los adolescentes y la promesa de su futura fuerza.

Según una anécdota publicada por el biógrafo de Miguel Ángel, Giorgio Vasari, un ciudadano de Florencia, Pietro Soderini, se quejó de que la nariz de David era demasiado larga. Ante la crítica, Miguel Ángel fingió golpear ligeramente la nariz. Cuando terminó, Soderini exclamó: «¡Ahora sí que parece real!».

Cuando fue colocada en la Piazza della Signoria, la escultura fue apedreada, probablemente por seguidores del clan Medici ya en el exilio que la veían como un símbolo de la república. En 1527, durante una revuelta, se rompió el brazo izquierdo. En 1873 retiraron la estatua de su enclave para reparar el daño causado por los elementos y la contaminación. Cuando estaba ya a buen recaudo, en la Academia de Bellas Artes, se colocó una copia en la plaza. En 1991, un pintor italiano que había perdido el juicio atacó el original con un martillo, aplastando uno de los dedos del pie de la figura.

Como anticipación al quinto centenario de la estatua, se limpió utilizando agua destilada. En la actualidad se está considerando la posibilidad de instalar chorros de agua permanentes para evitar que se pueda acumular la suciedad sobre la obra. Hoy en día, el David se puede contemplar en la Gallería dell’Accademia junto a otras esculturas de Miguel Ángel, como los cuatro esclavos inacabados que diseñó para el mausoleo del papa Julio II.

Post Author: Entorno Estudiantil

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